En 2022 nos vamos a Marte con Elon Musk

Durante su intervención en el Congreso Astronáutico Internacional que ha tenido lugar a finales de septiembre en Guadalajara, México, Elon Musk (padre de PayPal y Tesla Motors además de SpaceX) no dejó indiferentes a los presentes al exponer sus ideas sobre la exploración espacial en el futuro a medio plazo, incluso a corto plazo, pues opina que en 2022 podría empezar a establecerse una colonia marciana. Su charla se tituló «Haciendo a los humanos una especie interplanetaria».

Musk aseguró que, ante todo, es necesario tener claro cuál es el objetivo a largo plazo de la humanidad como grupo global o raza: si decidimos quedarnos en la Tierra, será solo una cuestión de tiempo que llegue nuestra exterminación. La única solución para prolongar nuestra existencia pasa por colonizar otros mundos, y Marte es el mejor lugar para empezar a hacerlo. Para Musk, el objetivo tiene que ser no tanto “llegar” a Marte, como conseguir que haya allí una comunidad capaz de sobrevivir de forma autónoma, y para eso calcula que hará falta una población de un millón de personas: según sus cálculos para lograrlo tardaremos entre 40 y 100 años.

Para empezar a trasladar personas a Marte, el proyecto de Musk contempla empezar a usar naves reciclables que desplazarían grupos de entre 100 y 200 personas cada 26 meses. Ese tipo de naves podría estar preparada en 2022, y no harían falta astronautas super-preparados para dar el salto al planeta rojo, sino que cualquier persona con buena salud y un mínimo entrenamiento podría conseguirlo. El precio del billete, en principio solo de ida aunque según Musk “quien quiera regresar podrá hacerlo gratis”, estaría entre 100.000 y 200.000 dólares, en función de cuántas cosas pretenda llevarse (peso del equipaje).

¿Podremos viajar a Marte pronto?

Ahora mismo esa misión es una utopía, puesto que el coste de llevar una sola persona a Marte se estima hoy por hoy en 8.900 millones de dólares. El primer objetivo de Musk es conseguir disminuir esa cifra al valor aproximado de una casa en Estados Unidos, y el primer paso es cambiar la tecnología prevista.

El vehículo espacial marciano de Musk tendría como propulsores motores cohete reciclables: tras consumir su combustible, volverían a la Tierra para ser recargados, volver a ser lanzados y seguir impulsando la nave antes de volver a ser reciclados, así hasta tres veces. La misión duraría entre 80 y 150 días al principio, pero el tiempo iría bajando al mejorar la tecnología hasta unos 30 días.

Musk llegó a mostrar un vídeo explicando y simulando todo esto, en el que también había grabaciones de las primeras pruebas del motor “Raptor”, el que movería a esa nave y que contará con un empuje que triplica el de los actuales motores de ese tamaño.

El presidente de Tesla afirma que hasta Marte “irá todo tipo de empresas, desde metalúrgicas hasta pizzerías: lo único que necesitarán los primeros será espíritu aventurero y ganas, además de talento. Nuestra parte será conseguir un medio de transporte que facilite a quien quiera ir a Marte poder hacerlo y crear allí algo nuevo, ser parte de esa nueva civilización”.

Elon Musk espera que se adhieran a su proyecto gobiernos y otras empresas privadas para poder conseguir una gran alianza internacional pública y privada. ¿Será el mismo Elon uno de los primeros colonizadores? “Me gustaría, pero ahora mismo prefiero quedarme un tiempo en la Tierra y ver crecer a mis hijos. Pero más adelante, sí, después de dejar un buen plan de sucesión aquí porque el viaje, especialmente al principio, no estará libre de riesgos”.

Si te ha gustado este artículo, suscríbete a nuestra newsletter para saber más:

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.